El Stadium Nelson Mandela de Port Elizabeth vivió uno de los partidos más intensos de este Mundial 2010. Un Brasil-Holanda que tenía a la "Canarinha" como favorita y que ha terminado con sorpresa y triunfo "oranje" por 2-1, entrando en semifinales.
La primera parte fue claramente para Brasil, que pronto se adelantó en el marcador. A los 10 minutos un pase al hueco a Robinho que desmarcado marca el 1-0. Los de Dunga dominaban la situación y Robben, la estrella holandesa, estaba secado por Bastos. De hecho, Brasil pudo haber dejado resuelto el choque en dos acciones. A los 24 minutos un disparo alto de Juan tras centro de Dani Alves y a los 30 un jugadón de Robinho con disparo final colocado de Kaka que envió a corner el meta holandés.
La segunda parte fue totalmente distinta. Holanda adelantó líneas y apareció Robben para volver loca a la zaga rival. Pero la jugada clave llegó en el minuto 52. Un centro de Sneijder y un salto de Melo descompensado ante la salida de Julio César hace que el balón se introduzca en su meta. Un accidente deportivo que cambió el panorama. Robben despertó en un partido muy abierto en su última media hora. La remontada se culminó a los 67 minutos con un córner de Robben mal defendido por la zaga brasileña y cabeceado por Sneijer a la red. Un jugador que raramente marca de cabeza pero que sirvió para colocar a los suyos en una semifinal mundialista.
De ahí al final épica, más emoción, juego duro, muchas faltas y la expulsión de Felipe Melo en el minuto 72 por un pisotón a Robben. El ahora jugador del Bayern Munich descentró a medio equipo carioca, que pese a intentarlo no pudo alcanzar la igualada.
Brasil se va a casa y Holanda avanza en este Mundial 2010.
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